La Attraversiamo. Ep V Persiguiendo al Carroñero

14 horas antes...

Los agentes de la Oficina de Seguridad Imperial (OSI) obtienen una copia de información de la cápsula hiperespacial de manos de un administrador/informante de la Rueda. El supervisor Liers Ossnan, encargado del caso y consciente de que dos grupos rivales ya están en ruta hacia Cholganna, ha decidido encargarse personalmente del asunto. La velocidad es prioritaria. No tiene otra opción mas que solicitar al Cuerpo de Exploradores Imperiales que le devuelvan un favor y le preste una de sus naves más rápidas "compartir el crédito es mejor que no tenerlo".

Abordo de La Oscuridad Profunda, una astronave de exploración del espacio profundo clase Rastreacielos, y utilizando la soberbia base de datos de astronavegación del Cuerpo de Exploradores Imperiales junto a los datos de la cápsula hiperespacial ponen rumbo a Cholganna.

La Oscuridad Profunda tiene pocos problemas para ajustarse a la nebulosa del remoto y aislado planeta. Aunque les lleva varias horas examinar el planeta logran dar con la nave del clan yiyar, el Carroñero Nocturno, mientras algunos supervivientes de la Sa-Nalaor la estaban despiezando.

En pocos minutos Liers Ossnan hace notar su determinación y falta de escrúpulos para obtener información de los supervivientes. Una vez obtiene lo que desea los mata y pone rumbo al Santuario, dejando previamente un equipo automático de armamento de vigilancia en el perímetro de las naves

ahora...

El campamento de los supervivientes de la Sa-Nalaor es un polvorín. La paz de Cholganna se ve alterada por la contienda entre los agentes de la Oficina de Seguridad Imperial (OSI), los mercenarios del Clan Yiyar, los cazarecompensas de la Attraversiamo y los supervivientes. 

Cratala, aterrorizada ante la idea de ser capturada y devuelta a Coruscant para servir al Emperador, decide soltar a los Nexus cibernéticos para crear mayor confusión y así poder escapar. Los personajes huyen del bélico escenario en el que se ha convertido el Santuario, convenciendo antes a Cratala de que escapen juntos en la misma nave.
El claro donde se encuentran tres naves (El Carroñero Nocturno, La Attraversiamo y El Oscuridad Profunda) se convierte en escenario del enfrentamiento cruzado entre el armamento de vigilancia puesto por los agentes de la OSI, los disparos láser desde el carguero YT-2400 de los yiyar (el carroñero) y desde la nave de transporte 578-R (la Attraversiamo), mientras que los escudos y la seguridad de la Oscuridad Profunda impiden un rápido e improvisado abordaje. Aunque finalmente la nave perteneciente a Recuperaciones Yiyar emprende el vuelo, no sin antes hacer bajar los escudos de La Oscuridad Profunda inutilizándola. Los cazarecompensas de la Attraversiamo y su "invitada" la arkaniana Cratala emprenden una persecusión y rastreo del Carroñero, suponiendo que en su interior se encuentran Harsol y el droide IT3PO, que les lleva hasta el tóxico planeta Raxus Primero.

Sobre Raxus Primero

El planeta más tóxico de la galaxia, está cubierto de montañas de desechos industriales, tecnología obsoleta, pecios de astronaves, y los desperdicios de siglos de fabricación no controlada. el planeta sirve como vertedero tóxico industrial. Ha caído muy bajo desde su posición de capital el Reino de Cron antes de la República. Durante las guerras clon, Raxus Primero volvió a cobrar importancia brevemente cuando el conde Dooku anunció en el planeta la formación de la Confederación e Sistemas Independientes. También se convirtió en un campo de batallas de la Guerras Clon.

Sorprendentemente, la vida sigue proliferando entre los inmensos desguaces oxidados y la atmósfera venenosa. Aunque son droides de los que llevan a cabo la mayoría de las actividades oficiales, grupos de recuperadores buscan entre las montañas de chatarra en busca de metales valiosos, objetos desaparecidos de valor, o simplemente algo que les permita sobrevivir un día más. 

La intensa mayoría de estos recuperadores son jawas, traídos hace mucho tiempo desde Tatooine. De hecho, la mayor parte de la vida inteligente del planeta está compuesta por jawas, con los humanos en un distante segundo lugar.

El duro entorno, las interminables montañas de desperdicios y el escaso control gubernamental local hicieron que en otra época el planeta fuera un paraiso para los jawas. Sin embargo, desde la toma del control Imperial, los jawas han aprendido con rapidez a evitar a todos los imperiales. Ahora comercian entre ellos y con otros habitantes del planeta, pero siguen compitiendo agresivamente por cualquier oportunidad de comerciar con visitantes no imperiales del planeta.