viernes, 20 de abril de 2018

La Comadreja Blanca. Ep XXXIII. Colonos y Tribus. 1ª parte


Nos encontramos en el año 2 dBY. En plena Guerra Civil.
La Ciudad Sagrada de la Luna de Jedha, Las instalaciones de la Ciudadela del planeta Scarif, y finalmente el planeta Alderaaan. El reguero de desolación de LA ESTRELLA DE LA MUERTE terminó con su destrucción hace dos años durante la batalla de Yavin IV. Pero la contraofensiva Imperial esta siendo una caza sin cuartel. 
Las tropas imperiales han obligado a las fuerzas rebeldes a dejar sus bases secretas a lo largo y ancho de la galaxia, obligando a los rebeldes a huir a los rincones más alejados del espacio para reorganizarse. Igualmente, la destrucción de la Estrella de la Muerte ha provocado bruscos cambios en las jerarquías y políticas imperiales. DARTH VADER, señor del mal y mano derecha del EMPERADOR, supervisa y ejecuta los despiadados y siniestros planes de su amo.
En los Territorios del Borde Exterior, EL GREMIO DE LA COMADREJA BLANCA se ha labrado una reputación protegiendo rutas de contrabando y aceptando encargos de dudosa procedencia. Su Base Secreta en Nelvaan se encuentra bien oculta a los nativos, pero el interés de nuevos colonos ha sembrado la inquietud en el gremio. Es hora de enviar a una nueva tripulación.



Han pasado casi tres años desde la batalla en el bosque de Lamus donde el Alto Inquisidor Jerek murió. El equipo de fundadores del Gremio cambió aquel día. Desde entonces Viechi ha estado al frente de la gestión de los trabajos que han ido aceptando y Lylyth se ha centrado en reclutar nuevos potenciales para el gremio y en entrenar a una discípula. Zirick y Skugg continúan realizando trabajos para el Gremio. Del resto de la tripulación hace tiempo que no saben nada, R6-D6 y Oskara se unieron a la Rebelión.

Durante  los últimos encuentros con la nueva tripulación, Viechi y Lylyth se han mostrado taciturnos y demasiado ocupados como para dedicarles tiempo. Hasta su última reunión, donde les han indicado a los nuevos valores que se quedarán al cuidado de la base bajo el mando directo de Cratala. Y  acaban la reunión despidiéndose porque se van a embarcar en un sinuoso y largo viaje por las regiones inexploradas.

Poco tiempo después, llegó la primera misión de la Capitana Cratala:

CLIENTE: La Comadreja Blanca

OBJETIVO: Informar periódicamente sobre los intereses del grupo de colonos en el planeta. Establecer una base temporal en las instalaciones coloniales.



Para ello el gremio ha falsificado unos identichips y les ha dado al grupo formado por Zax, Chispas y Lianatha una misión real que les servirá de tapadera para acceder cómodamente a las instalaciones coloniales.

CLIENTE: El departamento de Exploración Xenodética del Imperio (antiguo departamento de xenología de la república)

OBJETIVO: Determinar el nivel de inteligencia de la especie nativa que los colonos han descubierto y su capacidad de integración en la sociedad galáctica.

TIEMPO: 20 días





Toman un carguero aeroespacial que viaja hacia Nelvaan (desde un astropuerto comercial). Con ellos viajan los materiales que necesitan en la colonia para reponer materiales fungibles, y también un pequeño vehículo planetario al que no acaban de ponerle un mote  que guste a todos,  y que ha sido parte del pago a la tripulación por aceptar la misión.



En las instalaciones, una de las primeras personas que conocen es  Sigal, quien hace las funciones de guía y enlace con los nativos nelvanianos. Pese a su carácter taimado le rodea un halo de agresividad que contrasta con sus afables palabras y gestos.  Durante la noche, Lianatha se cuela en varias dependencias y en una de ellas le llama la atención que tienen una colección de dientes y huesos muy variados clasificados como "muestras de especímenes nativos" y tienen más de un centenar. Por lo demás todas las muestras que ven se refieren a diferentes materiales inorgánicos.

Entablando relaciones con los operarios establecen una cronología de los trabajos de la estación: Llevan casi 9 meses en el planeta, hace unos 7 meses que solicitaron a la burocracia imperial que les enviaran a un grupo de xenólogos para establecer el estado de los nativos, pero hasta hoy nadie había aparecido. Estos últimos 7 meses están con el presupuesto congelado, la segunda fase de la colonización depende de los resultados del informe de tal manera que o bien les dejan total libertad para la extracción o por el contrario deberán de llegar a acuerdos con los nativos para poder explotar cualquier recurso.

Al amanecer del siguiente día tras su llegada "los xenólogos" salen a entablar relaciones con las tribus, sirviendo Sigal como guía, la primera tribu que visitan son los auto llamados Teigo Misentou esta tribu usa reuniones comunales para tomar decisiones y tienen en alta consideración los consejos del chamán. Los Misentou habitan en cuevas profundas y muy altas, pues el poblado se encuentra en la parte superior de unos acantilados. Estando con ellos aprenden cosas sobre la flora y la fauna locales. Por ejemplo, ésta tribu ha  desarrollado tácticas y estratagemas para ser capaz de dar caza a un Horax. Un enorme reptil nativo del planeta que suele medir más de 15 metros de alto,son unos cuadrúpedos robustos con piel gruesa y nudosa. Tiene cuernos en forma de Y y al final de su hocico y lo utiliza para desarraigar árboles y abrir madrigueras para comerse a colonias enteras que estén hibernando. Los Misentou conocen tan bién a los Horax que han descubierto que con el polvo de sus escamas y unos cuantos ingredientes más fabrican una suerte de "cal viva" con la que delimitan perímetros seguros alrededor de la aldea. Cual repelente.

También descubrieron la verdadera razón por la que los nelvanianos nunca se hayan acercado a la zona del planeta donde se encuentra la base de La Comadreja Blanca, resulta que aquella zona es conocida por las tribus como la Misentou Nex, una suerte de zona muerta o fantasma que ninguna tribu puede visitar desde que surgieron los nelvanianos mutantes, en la época de las Guerras Clon cuando el conde Dokku experimentó con ellos y con el planeta. Los nelvanianos mutados, los cuales son todos mancos, han sido todos exiliados y tienen la misión vital de impedir que ningun otro nelvaniano vuelva a ser corrompido o mutado.


Pero mientras Chispas y Lianatha conversaban con los nelvanianos, a Zax que les cubría las espaldas desde lejos como buen francotirador, se le complicó la tarde: Un wampa dió con él y quería algo más que un abrazo. Tax le planto cara y le hizo unas buenas heridas, pero no las suficientes como para tumbar al corpulento y blanco wampa. Sus compañeros no iban a llegar lo suficientemente rápido, se le estaba complicando la situación cuando apareció un veloz nelvaniano envuelto en una aura de nieve que impidió a Zax darse cuenta de cómo, en menos de 10 segundos, había logrado acuchillar al wampa hasta el punto de dejarlo como plato fuerte para la cena de ése día. Lo único que pudo ver es un resplandor verdoso a lo largo del filo de la espada del guerrero nelvaniano.



miércoles, 4 de abril de 2018

Hace mucho tiempo en una galaxia muy, muy lejana...

Nos encontramos en el año 2 dBY. En plena Guerra Civil.

La Ciudad Sagrada de la Luna de Jedha, Las instalaciones de la Ciudadela del planeta Scarif, y finalmente el planeta Alderaaan. El reguero de desolación de LA ESTRELLA DE LA MUERTE terminó con su destrucción hace dos años durante la batalla de Yavin IV. Pero la contraofensiva Imperial esta siendo una caza sin cuartel. 

Las tropas imperiales han obligado a las fuerzas rebeldes a dejar sus bases secretas a lo largo y ancho de la galaxia, obligando a los rebeldes a huir a los rincones más alejados del espacio para reorganizarse. Igualmente, la destrucción de la Estrella de la Muerte ha provocado bruscos cambios en las jerarquías y políticas imperiales.  DARTH VADER, señor del mal y mano derecha del EMPERADOR, supervisa y ejecuta los despiadados y siniestros planes de su amo.

En los Territorios del Borde Exterior, EL GREMIO DE LA COMADREJA BLANCA se ha labrado una reputación protegiendo rutas de contrabando y aceptando encargos de dudosa procedencia. Su Base Secreta en Nelvaan se encuentra bien oculta a los nativos, pero el interés de nuevos colonos ha sembrado la inquietud en el gremio. Es hora de enviar a una nueva tripulación.